Dios ha llamado a muchos pastores y evangelistas argentinos y se han establecido centenares de iglesias nuevas. Cientos de miles de personas han sido sanadas, salvadas y llenas del Espíritu Santo. Muchas vidas fueron cambiadas dinámicamente y milagrosamente capacitadas: hombres y mujeres argentinos bien preparados han sido levantados por Dios para llevar en alto la antorcha que Él encendió.
En 1954 el ministerio de Tommy Hicks marcó para siempre la historia de los evangélicos en Argentina. Durante 52 días cerca de dos millones de personas se acercaron al Estadio de Atlanta, en la Ciudad de Buenos Aires, para escuchar la palabra de Dios y recibir milagros de sanidad.
En 1969 el Reverendo Omar Cabrera al frente de la “Cruzada de Fe” en el pueblo de Concordia, provincia de Entre Ríos, abrió la brecha de salvación para miles y miles de personas que se congregaron ante el llamado del Altísimo recibiendo grandes milagros y liberaciones. Desde 1972 hasta el 2001 su ministerio consistió en abrir pueblos y ciudades que habían estado completamente cerradas e indiferentes al evangelio. En un momento se produjo una ola de visitación tan grande que las multitudes comenzaron a asistir de a miles, llenando estadios, plazas, cines, etc. Es imposible contabilizar las sanidades, milagros, prodigios y maravillas vistas al descender la unción abundante de Jesucristo el Sanador. En cada pueblo o ciudad la gente tenía hambre de seguir escuchando la Palabra expuesta con poder lo cual creaba un ambiente de alegría y fe. Visitando ciudad tras ciudad, llegó a predicarle a más de cuatro millones de personas. Solamente durante el año 1985.
En 1982 nace el ministerio Mensaje de Salvación en la ciudad de La Plata, presidido por el Evangelista Carlos Annacondia. Sus campañas evangelísticas alcanzaron a cientos de miles de personas y millones de personas en todo el mundo entregaron sus vidas a Jesús. Su ministerio impactó la Argentina, caracterizado por la manifestación del Poder de Dios, salvando almas, liberando a los cautivos, sanando a los enfermos, haciendo milagros y cientos de miles de personas recibiendo la llenura del Espíritu Santo.
En 1984 un matrimonio misionero estadounidense, Steve y Jeri Hill luego de haber estudiado por dos años el español en Costa Rica vinieron a trabajar en la obra a la Argentina. Steve Hill conoció el ministerio del Evangelista Carlos Annacondia y trabajaron juntos en una campaña en la ciudad de Mar del Plata, Argentina. “Milagros y maravillas sucedieron durante esas reuniones, nunca las olvidaré. A través de su trabajo vi iglesias crecer de 200 a 2.000 personas” relataba Steve Hill. Argentina fue ministrada, y bendecida por la familia Hill. Ellos trabajaron arduamente en la construcción de iglesias y en la predicación del evangelio.
En 1992 la búsqueda personal del Pastor y Evangelista Claudio Freidzon lo llevó a tener un poderoso encuentro con el Espíritu Santo, el cual revolucionó su vida y su ministerio. En una forma gloriosa y sorprendente, la fresca unción del Espíritu Santo inundó las reuniones de la Iglesia Rey de Reyes. Miles de personas de todas partes del mundo han venido a la iglesia buscando un renuevo espiritual. El ministerio trascendió el ámbito local y el Evangelista participó en grandes cruzadas y conferencias en los cinco continentes, ministrando personalmente a más de 2 millones y medio de personas.
De 1995 a 2000, al regreso de Argentina Steve Hill sirvió como evangelista del avivamiento de Brownsville en Pensacola, Florida. Ampliamente cubierto por los medios de comunicación, esta increíble serie de reuniones atrajo a más de 4 millones de personas a través de las puertas de la iglesia de la Asamblea de Dios de Brownsville. Las noticias comenzaron a difundirse en todo el mundo de que algo fuera de lo normal estaba sucediendo en este avivamiento. Durante esos cinco años, los devotos, los cínicos y los curiosos vinieron de todos los ámbitos de la vida, viajando desde 150 naciones diferentes de todo el mundo.
Desde Argentina el avivamiento se extendió a todo el mundo.
Dios está llamando por sueños y visiones a una nueva generación de evangelistas a predicar el evangelio a las multitudes. Campamento Comisionados puede ser su oportunidad de responder al llamado de Dios y acelerar el propósito de Dios para su vida.
¿Sé imagina estar parado delante de miles de personas a una sola voz gritando el nombre de Jesús?
Es el tiempo del cumplimiento de muchas promesas, los tiempos están cambiando. Jesús vuelve pronto y nosotros debemos ir por todo el mundo y predicar el Evangelio.
No permita que los sueños y visiones que Dios le dio queden simplemente como algo lindo que recibió.
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